¡El otoño está a punto de llegar! Y con él una de las mejores épocas del año para sembrar el césped. Después de pasar el caluroso verano aguantando el calor y la sequedad, a principios de la nueva estación podemos recuperar parte de nuestro precioso manto verde. ¿Cómo hacerlo de manera correcta? ¡Sigue leyendo!
Cómo sembrar el césped correctamente en 5 pasos
Antes de comenzar, hay una serie de procesos que debes llevar a cabo y que te explicamos de forma detallada en nuestro artículo sobre cómo preparar el terreno para el césped. Cuando la tierra esté lista, procederemos al sembrado.
Un último rastrillado y comienza a esparcir semillas
Lleva a cabo un rastrillado justo antes de echar las semillas sobre la tierra, así esta última estará oxigenada y en perfectas condiciones para acoger las nuevas plantas.
Luego lanza las semillas con la mano, no importa si lo haces un poco a voleo. Sin embargo, intenta que la distribución sea lo más homogénea posible. También existen diferentes herramientas de las que te puedes ayudar si quieres que la cantidad de semillas en cada espacio de césped sea exactamente las misma.
Rastrilla… al revés
Lleva a cabo un suave rastrillado con el rastrillo puesto “al revés”. Es decir, que el rastrillo no hinque sus dientes en la tierra, sino que la acaricie un poco incrustando las semillas en el terreno.
Deja el terreno a su aire
Aunque en muchos lugares suelen aplastar la tierra con un rodillo, también puede dejarse perfectamente “a su aire”, tal como ha quedado después del último rastrillado. Además, tras el penúltimo paso para sembrar el césped, el riego, la tierra queda mucho más llana y uniforme.
¡A regar!
Intenta mantener la parte superficial del terreno húmeda hasta que germinen las plantas. ¡Pero ojo! No es necesario regar en gran cantidad y empapar las zonas más profundas del terreno, ya que las semillas están en la capa superior. Mejor riega varias veces al día durante un par de minutos y gastando poca cantidad de agua. Conforme las hierbas van creciendo, la cantidad de riego debe disminuir.
El césped ya se ve…
Ahora que ya sabes cómo sembrar el césped y las plantas ya han nacido, recuerda recortarlas, abonarlas y, en definitiva, cuidarlas con mimo para que se vean siempre como la preciosa alfombra verde que quieres tener en tu jardín.