Los setos son muy recurrentes en jardines, parques y espacios verdes de todo tipo para delimitar diferentes zonas de una forma muy natural y armoniosa. Sin embargo, a veces surgen dudas sobre la frecuencia con la que hay que podar los setos para tenerlos sanos y frondosos. Por ello hoy queremos enseñarte cada cuánto tiempo hay que podar los setos según sus características.
Lo primero que debemos saber a la hora de podar los setos es que hay dos tipos:
Podar los setos formales
Este tipo de setos son muy frecuentes en grandes jardines y suelen utilizarse con formas geométricas para dar sensación de mayor cuidado.
Cuando son pequeños, y en caso de que no estemos buscando tener un seto de más de 1,5m, hay que dejar que crezcan de forma libre para que vayan adquiriendo cada vez más espesor y altura. En estos primeros momentos en los que el seto aún está inmaduro solo se debe podar en caso de que algunas ramas laterales parezcan crecer con demasiada fuerza.
En caso de que necesites generar un seto de mayor altura, cuanto llegue al metro y medio es importante que se “descabece”, es decir, que se corten las ramas superiores para frenar el crecimiento. De esta manera, aunque se tarde más en alcanzar la altura deseada, te aseguras de que la planta no quedará poco frondosa por la parte inferior. Sin embargo, este “descabezado” se lleva a cabo siempre y cuando no sean coníferas, ya que en tal caso se deben dejar crecer hasta llegar a la altura que se desea.
En cualquier caso, cuando se ha llegado a la altura deseada se deben podar los setos unas dos veces al año, una en abril-mayo (en mitad del crecimiento potenciado por la primavera) y otro en septiembre (para controlar el pequeño rebrote que puede darse en otoño). Estos patrones se deben seguir en caso de que el seto se encuentre en un clima continental, ya que para otro más suave, como el mediterráneo, deben llevarse a cabo unas 4 podas anuales (principios de marzo, mediados de mayo, entre julio y agosto y a finales de octubre).
Podar los setos informales
Estos setos se dejan crecer libremente, incluso pueden dar lugar a hermosas floraciones durante la primavera. Solo se deben podar los setos una vez al año (o incluso ninguna si la planta no ha crecido demasiado).
Este tipo de setos son muy recomendables debido a que precisan de muy pocos cuidados y se pueden obtener resultados muy llamativos y naturales.
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